Juana I de Castilla, su último viaje…
La noche del 20 de diciembre de 1506, Doña Juana, embarazada de 8 meses, inicia su último viaje.
Con el propósito de cumplir la última voluntad de su marido, se dirige a Granada, para enterrar a Felipe junto a su madre Isabel.
Después de dos años de viaje, su padre Fernando El Católico, decide “parar” en Tordesillas; para ella, sólo era eso, un alto en el camino…
El Rey Fernando II de Aragón elige el Palacio Real de Tordesillas como morada definitiva para su hija; ese alto en el camino duro 46 años hasta su muerte en 1555.
Juana I de Castilla, su último viaje…
La noche del 20 de diciembre de 1506, Doña Juana, embarazada de 8 meses, inicia su último viaje.
Con el propósito de cumplir la última voluntad de su marido, se dirige a Granada, para enterrar a Felipe junto a su madre Isabel.
Después de dos años de viaje, su padre Fernando El Católico, decide “parar” en Tordesillas; para ella, sólo era eso, un alto en el camino…
El Rey Fernando II de Aragón elige el Palacio Real de Tordesillas como morada definitiva para su hija; ese alto en el camino duro 46 años hasta su muerte en 1555.